El sistema linfático colabora estrechamente con el sistema inmunológico, por lo que el drenaje linfático manual mejora de manera general el estado de salud y ejerce un papel muy beneficioso en el sistema nervioso, además de tratar específicamente distintas afecciones.
Qué hace el drenaje linfático manual? El drenaje linfático manual es una terapia que consiste en realizar sobre la piel un masaje de movimientos lentos, rítmicos, armónicos y muy suaves que, cuando se realizan en la dirección correcta, siguiendo la corriente de los conductos linfáticos, estimula el drenaje de estos conductos linfáticos, limpiando las zonas congestionadas. Según los Vodder, esta técnica requiere cierta dosis de intuición y mucha precisión, ya que la presión es un factor determinante y cada caso, así como cada paciente, requiere cuidados y manipulaciones específicas.
Indicaciones El drenaje linfático manual ha sido abundantemente empleado en la medicina alternativa, aunque cada vez más se usa también en hospitales, fundamentalmente en el área de oncología para el tratamiento de linfedemas, edemas traumáticos o complicaciones linfáticas posteriores a una cirugía. Otra de las áreas donde el drenaje linfático manual ofrece muy buenos resultados es en el campo de la estética. Estas son algunas de las indicaciones del drenaje linfático manual:
- Edemas (embarazo, faciales, linfoestáticos, del sistema nervioso, postoperatorios, etc.)
- Várices
- Fibromialgia
- Acné
- Celulitis
- Piernas cansadas o hinchadas
- Migrañas, dolor de cabeza, vértigo
- Artrosis, artritis
- Hematomas
- Hipertensión
- Edema pre-menstrual
- Edema post-quirúrgico
- Hipotiroidismo
- Edema por problemas renales
- Afecciones del aparato digestivo
- Ansiedad, estrés
Beneficios
- Regula el equilibrio hídrico del organismo
- Mejora el funcionamiento del sistema linfático
- Mejora la circulación de retorno
- Depura el organismo
- Tiene un efecto muy sedante en el sistema nervioso
- Baja la presión sanguínea
- Estimula la función renal
- Estimula el sistema inmunológico
ANEXO: En tratamientos post quirúrgicos se suma Ultrasonido. Es una técnica no invasiva que utiliza ondas sonoras de alta frecuencia para mejorar la recuperación después de una cirugía, especialmente en procedimientos estéticos.
Ayuda a reducir la inflamación, acelera la cicatrización y mejora el drenaje linfático.
- ¿Cómo funciona? El ultrasonido genera microvibraciones en los tejidos, lo que produce varios efectos beneficiosos:
- Reducción de la inflamación: Las ondas ultrasónicas ayudan a movilizar los fluidos acumulados en la zona intervenida, reduciendo el edema y la hinchazón.
- Aceleración de la cicatrización: El ultrasonido estimula la regeneración tisular, favoreciendo la producción de colágeno y la reparación de los tejidos.
- Mejora del drenaje linfático: Al estimular la circulación, el ultrasonido ayuda a eliminar toxinas y desechos metabólicos, favoreciendo la eliminación de la inflamación.
- Alivio del dolor: El ultrasonido puede ayudar a reducir la sensibilidad dolorosa en la zona afectada.
- Disminución de las adherencias: Las ondas ultrasónicas pueden ayudar a romper las adherencias fibrosas que se pueden formar después de una cirugía.